EL MISMO CANDIDATO

Estaba pensando hace poco en los inicios de la gestión de Nicolás Maduro como presidente, recordaba los tiempos de "millones y millonas", "los panes y los penes", camaradas y camarados" y otros errores producto de las ganas de hacerlo bien, digo yo, de aquel hombre inseguro, que no sabía ni que decir, entre el dolor de haber perdido físicamente a nuestro Gigante Chávez y el peo en que estaba metido.

Escuché a muchos camaradas decir, "que va a saber ese tipo", "lo que es, es un autobusero", "el pana no tiene estudios", "es un ignorante", "Chávez se equivocó", poco tiempo había pasado y los ataques habían arreciado contra la revolución, cuando salieron gente muy cercana al comandante Supremo a desligarse del Gobierno de Maduro, gente preparada que no podía aceptar ser dirigidos por un vulgar chofer, con este panorama y el ataque incesante de la derecha fue aplomando Maduro su discurso, sus acciones y su propio estilo.

No voy a señalar las estrategias con las que Nicolás nos ha demostrado ser un verdadero hijo de Chávez y derrotó a la oposición apátrida.

Esto lo escribo simplemente porque en esos tiempos también escuchaba muchos camaradas barajar nombres de posibles candidatos a la presidencia por la incapacidad de Maduro, no voy a preguntar su opinión en la actualidad.

Ahorita escucho a una serie de afectos al Gobierno, tal vez a los bonos que otorga el Presidente Constitucional Nicolás maduro Moros, hablar solo de frenar la especulación desmedida y de que si esto sigue así no están seguros de que Maduro repita la presidencia, realmente es triste que a estas alturas de nuestro proceso, sigamos sumidos en la "Cultura Mesiánica" en la inacción de la representatividad y no seamos capaces de accionar con el protagonismo que requiere el momento histórico que atravesamos, no el que reza la constitución, sino ese protagonismo que resuelve y no que critica en nombre de la autocrítica, el que pide sumido en la ignorancia "ayuda humanitaria gringa", "escaparse del país porque la crisis es culpemaduro", el que da la razón a los discursos edulcorados de los vendepatria de siempre, porque el Gobierno o más específicamente Nicolás Maduro debe resolver hasta los problemas de infidelidad en cada hogar del territorio Nacional.
Sin embargo en la calle ya todos y todas olvidaron al Maduro de el inicio de este escrito y un pueblo arrecho como el nuestro sabe y entiende que nuestro presidente obrero y chavista Nicolás Maduro, es EL MISMO CANDIDATO.

-¿Sembrar en materos? y acabaste el hambre en Venezuela, me comenta una vecina, la misma que me pide cilantro y cebollín de mis materos, para sus aliños.

La lucha sigue y es de clases.

¡No somos los de izquierda, menos los de derecha; somos los de abajo y vamos por los de arriba! 

Alejandro Serrano "El Trova"