Al amanecer oí trinar de pájaros
y un olor a primavera inundó mis pulmones,
dibujando flores en mi mente,
nubes de algodón de azucar,
cubriendo el cielo azul amor,
mientras un sol de gelatina,
sonrie a la mañana.
Entre ese trinar de pájaros,
la melodía detu voz colorida,
pintaba en colores pasteles,
un arcoiris,
un nuevo día,
la fe de la vida,
el arrollo de tu vientre,
en el me sumerjo,
me lo bebo en un trago,
embriaguez de tu esplendor.
Y salgo salpicando el comino,
por cada gota derramada,
brota una flor,
violetas,
siempre vivas,
jazmines,
tus labios en flor
y junto a las margaritas,
confundiendo sus colores,
tus pezones,
tus aureolas.
Al instante,
un canario trinó tu belleza,
en tono de sol radiante
y un rocio fresco,
suave,
me envolvió de tu fragancia.
Al amanecer,
despierto,
te vi a mi lado,
me llené de tu cuerpo,
de tu amor,
y lleno de ti,
enfrento el nuevo día.
Alejandro Serrano
